Comienza Roger Taylor haciendo vibrar los platillos, un segundo después se escucha el bajo de un virtuoso John Deacon : “Ding-Ding-Ding Diddle Ing-Ding”. A la melodía se suma Brian May con un par de acordes de guitarra. Ha comenzado la magia. El doce de julio del ochenta y seis más de setenta mil personas enloquecieron en Wembley, fue uno de los conciertos más importantes de la última gira de Queen. En un acto involuntario cierro los ojos, muevo la cabeza y se me escapan los pies. Mi corazón late al ritmo de “Ding-Ding-Ding Diddle Ing-Ding”. Da igual si estoy sudando en la elíptica, en un preoperatorio o a las tres de la madrugada en la cama, en mi cerebro ocupa un lugar privilegiado. Entonces aparece Dios con su bigote, sus pantalones ajustados, sus Adidas Samba y su mítica chupa amarilla. Agarra el micro como sólo él hace y empieza a tararear “Mmm num ba de/Dum bum ba be/ Doo buh dum ba beh beh”. Alza la voz y con fuerza canta “Pressure pushing down on me/ Pressing down on you, no man ask for /Under pressure that burns a building down /Splits a family in two/ Puts people on streets”. Es Under Pressure, mi canción preferida. A Queen algunas generaciones llegamos tarde, su final nos pilló en pañales. Sin embargo el tiempo que permanecieron juntos fue toda una declaración de intenciones. Canciones que si las destripas puedes llegar a conocer al mismísimo Freddie cuando ni él mismo intuía aún quién era. Sabían que iban a ser una banda de rock atípica, que su osadía les costaría caro pero también que le otorgaría un puesto de honor en la historia de la música. Al fin y al cabo “God Save The Queen”.
De Farrokh a Freddie Mercury
Cuentan los mercurianos que Su Majestad nació tres veces. La primera fue en Zanzíbar como Farrokh Bulsara. Sus padres le educaron en el zoroastrismo y desde muy temprana edad entendió que la vida era para disfrutarla fuese como fuese. Gran parte de su infancia transcurrió entre el boxeo, las burlas por sus cuatro incisivos adicionales, el internado en Mumbai y el consumo de revistas occidentales junto a su hermana. En la ciudad india, su familia vio una habilidad especial en él. Tenía lo que se conoce como oído absoluto. Era capaz de escuchar una canción en la radio y reproducirla al piano sin partituras. Al terminar el internado no pasó mucho tiempo en Zanzíbar. El estallido de las revueltas empujó a su familia a trasladarse a Londres y la anomalía que habitaba en él se disparó al mismo tiempo que comenzó a encontrar su lugar.
Le insultaban por su procedencia, el color de su piel, su dentadura y su amaneramiento. Una vida agrietada que por la que pronto se colaría el sol. Porque sobre todas esas debilidades Freddie supo edificar su fortaleza y su mayor virtud. Con la ayuda de Mary Austin comenzó a dejar de esconderse, a mostrarse tal y como sentía que era. Se coló en la sección de ropa femenina de BIBA, se pintó los ojos y las uñas de negro y apostó por un look que de verdad le representaba. Él había venido al mundo para brillar y no ser del montón. Nace por segunda vez, ahora rebautizado bajo el nombre de Freddie Mercury en honor al mensajero de los dioses. La salida de Tim Staffell de los Smile forzó la búsqueda de un nuevo vocalista. Puesto en el que Freddie encajaba a la perfección. Tiempo después, Deacon se sumó al proyecto y surgió Queen. Freddie convirtió la mofa con la que habían machacado en el nombre del grupo. Nadie más estrafalario que él para adoptar un título semejante. Un grupo compuesto por cuatro inadaptados muy diferentes haciendo música para otros inadaptados. Una banda que brotó de las cenizas de otras como el Ave Fénix.
Queen
Juntos cruzaron los límites, burlaron los códigos morales y mezclaron géneros consiguiendo un sonido nuevo y personal que cautivó a las masas e hipnotizó a las élites. Un sonido embrionario a base de armonías y superposiciones de capas de audio. En ocasiones un ritmo a base de palmas y golpes en el suelo que hacía que los espectadores formaran parte de la ceremonia, del sacro concierto de Queen. Por otra parte, sus letras eran un juego de espejos que nada y todo tenía que ver con ellos, eran su confesión más íntima. De manera individual, las ansias de Freddie en la exploración del yo le impulsaron a seguir sus instintos y matar al hombre que hasta ese momento había sido. “Galileo, Galileo“. Estaba cansado de sentirse solo. Su vida no era un lecho de rosas sino un reto constante. Reconocerse homosexual era un agravio para su familia y su religión, también para su público. En Estados Unidos el puritanismo obligó incluso a cancelar la emisión de I Want To Break Free, pero sobre todo era algo difícil de aceptar para él mismo.
La búsqueda incesante de alguien a quien amar y que le hiciera sentirse valorado hizo que Su Majestad saliera de su propia celda y encajara en su realidad. “Somebody find me, find me love”. Liberado de sus mentiras abrazó la vida como al micro sobre el escenario. Se la folló. Al disfraz de rockstar lo recubrió con la ciudad de Nueva York, donde se instaló con sus nuevas alas para protegerse de los chismes sobre su vida privada. Envuelto en una salvaje osadía teatralizó de manera insólita cada una de sus apariciones. Era un maestro de ceremonias que encandilaba al público sobre el escenario, en la intimidad un chico tímido que tenía que hacer uso del alcohol y las drogas para mostrarse con espontaneidad. Se sentía Under Pressure. Sólo en compañía de sus gatos, Mary Austin o Jim Hutton llegó a mostrarse tal y como era. Hutton le acompañó durante sus últimos años de vida, era su marido.
Under Pressure
En el ochenta y uno surge Under Pressure, uno de los mejores duetos de la historia del rock y lo mejor del álbum Hot Space. Dos de las voces más carismáticas, reconocibles y especiales de la época chocan al fin. Bowie había grabado los coros para una canción de Queen pero el resultado final no le gustó. Del desencanto y las ganas de hacer algo juntos surge Under Pressure. Roger Taylor, amigo de ambos, tuvo mucho que ver en que el proyecto saliera a flote. Orquestó la colaboración durante la estancia que compartió con Bowie en una clínica de desintoxicación suiza. Y de las cenizas de una canción compuesta titulada Feel like y una jam session en la que los cinco participaron en la melodía y la letra brotó Under Pressure. La improvisación final y la mezcla en el estudio de grabación es obra maestra de Freddie. El resultado es un bombazo que no te sacas de la cabeza. Es pegadiza y original y trata de la presión a la que nos sometemos a diario.
La tarea de coordinar los egos de Ziggy Stardust y Mr. Bad Guy no fue fácil, de hecho es uno de los motivos por los que se rumorea que no aparezcan en el videoclip. No cabía tanto ego. Tanto Bowie como Mercury decidieron crear su camino, eran el tipo de personas que se salían de la norma. No podían formar parte del rebaño por mucho que se les marcase de raros, ellos sabían que eran extraordinarios y por ello decidieron echarle un pulso al rock y la sociedad de la época. Presionados por todo y todos vivieron al máximo embriagados de rebeldía, canalizaron su vida a través de la música e hicieron que cada instante contase. El veinticuatro de noviembre de mil novecientos noventa y uno Freddie Mercury falleció de neumonía en Londres a causa del SIDA. Ese mismo día nacía por tercera vez, ahora convertido en leyenda. El show sólo podía continuar en alguien que había vivido mirando hacia delante. Un alma pintada con alas de mariposa, un cometa que dejó tras de sí una estela brillante que seguirá iluminando a las nuevas generaciones del rock. Allá donde estés “EE OO!! DIRODIRO DIROEEOO EEEEOOO!!”. Siempre Freddie.
Fue, es y será una MARAVILLA ‼️‼️
Que bien lo has contado 😍😍
Eterno Freddie Mercury. Es mi pequeño homenaje a mi estrella favorita. Muchas gracias Boto!!!
Lo confieso, estoy dando saltos por la habitación como si estuviera en el 86 en Wembley cantando a grito pelado porque el texto me ha transportado y el vídeo final me ha dado el subidón total. Eterno Freddie.
PD: Reconozco que Under Pressure es lo mejor de Hot Space….pero también tiene otras joyas!!
Habría molado mucho estar en ese concierto, responder al EE OO y saltar como locos. Quizá algún día nos reencontremos en un faro 😉 (you know)
Y sí, quizá he sido muy tajante diciendo que era lo único bueno de Hot Space, me ha podido la debilidad…
Un superartista
Totalmente, un artista inimitable <3
El tio era maravilloso. Gracias por escribir esto y porque ahora estoy volviendo a ver por vigesimo cuarta vez el directo en Wembley 85 (buen año). Para mi, el tio más grande que se ha visto en un escenario, carisma inigualable. Que pena no haber podido verle en directo.
Estás viendo el Live AID!! Woooooow, qué conciertazo!! Yo también lo he visto estos días y lo he vuelto a disfrutar como una enana. Para mí también el tío más grande sobre un escenario. Supongo que siempre nos quedarán esas joyitas que nos dejó, un legado musical espectacular 🙂
Me ha encantado
Qué alegría!!! 🙂