Llevo toda la mañana con una sonrisa bobalicona que no me la quito. Levito entre el salón y la habitación. Me paro frente a la nevera pensando en una Coca Cola, pero no hace falta, ahora mismo llevo la chispa de la vida dentro. Y no es chispa sino incendio. Os cuento, os cuento. Pues resulta que después de mucho tiempo premian mi excepcional labor, mi rol en esta sociedad, y todo porque ¡vuelve La Liga, vuelve La Liga! En la película que me estoy montando en mi cabeza llevo el mismo Versace de plumas que lució Penélope en la gala de los Oscar de 2007. En un abrir y cerrar de ojos me teletransporto desde mi casa a uno de las asientos del Teatro Kodak. Butacas sobre las que han reposado afamados traseros. Y de repente, justo aparece en un pequeño recuadro en la pantalla mi cara nerviosa junto a otras cuatro más. Bueno, una no lo está porque sólo es una fotografía, no ha podido acudir. El caso es que somos las cinco seleccionadas para llevarnos el mayor galardón que la industria concede. Pero sólo una se llevará la ansiada estatuilla. Espero haberme acordado de traer mi discurso, de haber hecho uno, que no me pase lo que a Natalia de Molina la segunda vez que recogió el Goya.
Vuelve la Liga Fantasy
Hoy, tras el anuncio de Jorge en el grupo de WhatsApp avisando de que vuelve La Liga y con ella la Fantasy, tras el efecto dominó de participantes que han rechazado jugar una nueva temporada bajo el “tío, este año no me apetece”, he sido yo la candidatA propuesta como nueva promesa. ¿Habéis visto bien esa A? Es la primera vez que esto ocurre. Estoy entre el banquillo y la titularidad, pero no soy ni Lucas Vázquez en la última temporada. Ya no quedan suplentes, soy la última esperanza. Es el desplome del grupo, el fin de una era. Si ya comenzaban a faltar excusas para reunirse bajo la todopoderosa e incuestionable fuerza de “¿unas cervezas? Yo invito”. Una combinación de palabras capaz de desarrollar habilidades de telequinesis, clarividencia y control mental, el rechazo a participar una temporada más en la Fantasy se ha traducido en una caída mayor que la de la Bolsa en el 29. El fin de la Orden Jedi. Se acabaron los años locos.
Hace mucho tiempo, en una galaxia lejana, muy lejana…
Nos encontramos en un periodo de guerra de intereses. Los líderes de los principales bandos han sido desterrados a…París. Hay un vacío de estrellas en la galaxia. Millones de aficionados se han quedado huérfanos. Los dorsales de Ramos y Messi, que se vendían como valores seguros, han pasado a ser piezas de coleccionista. Es la primera vez que en esta casa no se renueva la suscripción al canal de fútbol. Es la antesala del desencantamiento. Ilusiones que caducan. Atrás queda ese gol de Raúl al Atleti (a día de hoy López sigue mareado buscando la pelota), el regate de Caminero a Nadal y cuando Eto’o le robó la cartera a Roberto Carlos. Inolvidables han sido cada una de las santas paradas de Casillas o ese día que la afición del Madrid en el Bernabéu aplaudió a Ronaldinho. De San Leo Messi se puede enmarcar cada jugada porque ha hecho magia. Nos despedimos de los “penaldos” y ahora también de Ramos, el mejor defensa de la historia. Son ellos quienes han catapultado temporada tras temporada a la Liga española como la mejor del mundo. Son leyendas.
Soy España en Eurovisión
Un jarrazo me despierta de mi ensoñación, es Jorge que me dispara con un cruel “no, que al final no te necesitamos para la Fantasy, pero que si quieres puedo meterte en la Liga de los Jotas, lo comento con mis hermanos.” Ya no llevo el vestido de plumas, soy España en Eurovisión recibiendo puntos de compasión. Miro al árbitro para lanzarle una mirada de desconocimiento, empiezo los aspavientos y mi desplome espiritual. “Penaldeo”. Para ellos no soy ni Lucas Vázquez en el banquillo. Me voy a la nevera que ahora sí que necesito una Coca Cola. Tres tragos después recapitulo y me doy cuenta de que quizá ahora formo parte de algo mejor, un club de sangre. Tres personas que habrían querido congelar los goles de Iván Zamorano como los instantes de felicidad. Tres hermanos que leen cada artículo futbolero de Jabois con una sonrisa infantil. De repente formo parte de un club de gente muy selecta, gente chisporroteante.
Un club selecto con sedes repartidas por todo el mundo. Cuidadin.
Súper selecto de ahí el honor. Estoy nerviosa, sé que voy a tener que estudiar esta temporada.
Que empiece La Liga y la Fantasy!!! Vuelve el fútbol! Tendrás que fichar a Lucas Vázquez para tu equipazo
De momento creo que lo que tengo que hacer es vender a Ødegaard, qué penita ;(
Jajajaja. Mucho mejor la liga de consolación, ya veras! Pero Lucas Quinto se queda conmigo 😉
Na´, sólo era la excusa para buscar un drama y echarle humor y de paso ponerme un vestido de plumas. la Liga Jotas sí que es la mejor liga del mundo!